NAFTA nos pilla la máquina.

Como producto de una nueva correlación de fuerza a nivel mundial, como producto de la caída de la URSS y el bloque del este; podría pensarse que el imperialismo norteamericano ha salido mas fortalecido convirtiéndose en el primer país capitalista en el orden mundial, lo cierto es que en el plano militar a quedado como gendarme de los intereses del capitalismo mundial imponiendo su hegemonía. Este papel quedo demostrado en su agresión contra Irak, al lograr movilizar al resto de los países imperialistas a través de la ONU para aplastar la amenaza que significaba este en el medio oriente para su hegemonía. Pero el plano económico dista mucho de serlo, lejos de convertirse en la primera potencia económica Estados Unidos experimenta un frenazo en su economía al crecer a una tasa del 2,7% en el primer trimestre de este año, si se considera que solo en el cuarto trimestre de 1994 el ritmo de la expansión era del 5,1%. Al igual que una caída de las restas por menor del 0,4% y de la baja de la producción industrial de un 0,4%, ambas en abril, y a pesar de la baja del índice de desempleo hasta el 5,7% durante mayo, durante ese mismo mes la economía perdió mas de 100.000 puestos de trabajo.

A estos factores debemos agregar la nueva competencia por las áreas de influencia económica; Japón y la Unión Europea por Alemania que pretende obtener una tajada mayor del mercado mundial a costa de EE.UU.

El interés de Alemania por entrar en Latinoamérica queda de manifiesto en los planteamientos que el Ministro de Exteriores Klaus Kinkel expuesto ante el Bundestag (parlamento federal) durante el mes de septiembre de este año. En este informe se plantea la aspiración de Alemania de establecer un nuevo nivel de relaciones políticas, económicas y culturales con América Latina un continente que es considerado por Bonn una de las regiones mas dinámicas del planeta, cabe también destacar la decisión de la Unión Europea de iniciar negociaciones con la intención de suscribir un acuerdo bilateral con Chile, al igual con México y los países del Mercosur.

En palabras del ministro Kinkel llama a los empresarios alemanes a incrementar sus inversiones en la región "Inviertan mas en América Latina, aprovechen sobre todo las posibilidades que brinda las privatizaciones".

Esta competencia por los mercados ha llevado a EE.UU. a plantear una nueva estrategia para asegurar un área de influencia exclusiva en su histórico patio trasero, América Latina, para los cual ha encontrado una palabra mágica que a los oídos de las burguesías criollas suena a gran oportunidad cuando EE.UU. dice estafa, la palabra NAFTA.

La formula según los yanquis es fácil y bonita, nosotros abrimos nuestras barreras arancelarias y ustedes hacen lo mismo. Para la gran burguesía chilena esto le suena muy conveniente, la entrada de sus productos al gran mercado estadounidense (240.000.000 de habitantes con gran poder adquisitivo) sin restricciones, pero esto significa que EE.UU. pueda hacer lo mismo, o sea, entrar al mercado nacional sin restricciones, todo dentro del marco de la "equitativa" economía de libre mercado, igualdad de condiciones entre la oveja y el lobo; Chile ya tiene la experiencia de lo que significa esto, en 1982 esta misma clase de apertura significo una crisis económica que dejo al 30% de los chilenos cesantes y al resto en unos niveles de pobreza nunca antes vistos.

El plan económico que promueve el NAFTA esta enfocado a lograr implantar la "globalización de trabajo", esto significa que los países Latinoamericanos produzcan lo que les resulte mas barato y el resto se compra en el extranjero, en este caso EE.UU., o sea, que Chile produzca cobre, fruta y algunas materias primas y EE.UU. nos venda maquinarias, electrodomésticos, telas, etc. Con esto EE.UU. logra asegurar su suministro de materias primas a bajo costo y un área económica exclusiva para la venta de sus productos, así como también asegurar que el desarrollo industrial de nuestros países se estanque manteniendo su dependencia.

De esta transacción tan ventajosa saldrán bastante favorecidos los grandes grupos capitalistas nacionales, que tienen sus inversiones puestas en la agroindustria hortofrutícola

y los industriales cuya producción esta dirigida al extranjero. Son estos sectores los que promueven con bombos y platillos los beneficios del NAFTA, pero en el caso de la pequeña y mediana empresa, aquellos que producen bienes de consumo para el mercado interno la cosa se ve negra; para ellos la llegada de los productos norteamericanos de mejor calidad y menor precio, significara su desplazamiento del mercado al crearse una sobre oferta que los obligara a bajar precios.

Para lograr bajar sus precios y competir sus opciones no son muchas. Una es la inversión, implementación de nuevas tecnologías que les permita producir mas a menor precio. Al aumentar la producción se satura el mercado interno lo que los obliga a buscar nuevos mercados en el extranjero. En el mejor de los casos esto producirá un desarrollo económico, pero la experiencia de la crisis del 80 demostró que muy pocos pudieron hacerlo, ya que en muchas pequeñas y medianas industrias aun persisten procesos manuales que necesitan de mano de obra especializada casi artesanal. La instalación de maquinarias los haria innecesarios; al aumentar la división del trabajo como producto de la maquina ya no se necesitaran obreros con preparación, los que pueden ser reemplazado por otros sin especialización y por ende con un sueldo mas bajo aumentando la cesantía.

La otra opción, la que tendrán que adoptar aquellos que no cuenten con el capital para modernizar sus industrias es la de hacer bajar sus costos a cuenta de sus trabajadores bajado sus salarios, haciéndolos trabajar mas horas, en síntesis explotarlos mas.

Las futuras consecuencias que traerá el NAFTA han dado lugar a muchas propuestas para enfrentar esta amenaza. La mayoría de las colectividades de izquierda lanzan llamados a la movilización para detener las negociaciones, otros proponen relaciones de intercambio justas ¿ ...?, o lanzar grandes consignas esperando la gran movilización popular y una vez terminado el llamado solo se escuchan los grillos y las ranas.

Lo cierto es que el actual desarrollo de la lucha de clases en Chile esta lejos de dar pie a la gran movilización espontánea con la que muchos sueñan, lo cierto es que nos pillo la maquina.

UNIDAD SINDICAL FRENTE AL NAFTA

La pregunta ahora es: ¿ como luchar contra el NAFTA? Después del breve analisis expuesto anteriormente las conclusiones son bastante obvias, el sector donde las contradicciones son mas fuertes es al interior de la pequeña y mediana industria, viéndose agravadas las condiciones laborales de sus trabajadores que ya sin el NAFTA son objeto de abusos por parte de sus patrones apoyándose en la Ley Laboral vigente. La inestabilidad laboral de este sector se expresa en el número de trabajadores no sindicalizados, alrededor de 600.000. Si tomamos en cuenta este y otros antecedentes cualquier iniciativa para combatir el NAFTA, pasa por la sindicalización y organización del sector para luchar por sus intereses económicos los cuales están profundamente ligados a las consecuencias que traerá la firma del tratado; imprimiéndole un carácter clasista a este movimiento sindical, sincronizando cada huelga o rama de producción y por empresas pertenecientes a un mismo dueño o grupo, económico. Este proceso traerá como consecuencia una revitalización del movimiento obrero nacional el cual será la base para la conformación de un frente antiimperialista que tenga como prioridad la independencia económica y cultural de Chile, tarea que pasa por la profundización de la democracia.